El cambio de hogar da paso a nuevas oportunidades y experiencias. Además, teniendo en cuenta la amplia gama de proyectos inmobiliarios que hay en todo el país, prácticamente pueden conseguir vivienda donde la necesiten.
Sin embargo, no deja de ser un proceso complejo que en ocasiones resulta estresante: empacar, contratar una mudanza, cargar, desempacar, ordenar, etc. Pero aplicando los siguientes consejos todo puede ser más sencillo.
Antes de pensar en mudarse, hay que revisar el reglamento de la copropiedad o hablar con el administrador para saber cuáles son los requerimientos para hacerlo sin problema. Dar aviso con ciertos días de anticipación, o hasta semanas, y tener los gastos completamente cubiertos al día son algunos de los requisitos indispensables.
Para los ciudadanos que desean mudarse, el Artículo 4° de la Ley Número 20.227, establece como obligación solicitar y efectuar una declaración jurada ante notario. En esta se debe aclarar el domicilio del cual se irá y aquel al cual llegará. Además, requiere que el declarante no tenga ningún tipo de impedimento legal, contractual ni judicial a fin de realizar el cambio de hogar.
Sin esta declaración, conocida como salvoconducto, los carabineros pueden impedir la mudanza y el responsable de esta puede ser sancionado con una multa.
A la hora de realizar un cambio de hogar, las personas encuentran una sorprendente cantidad de cosas que ya no usan o no les sirven. Es importante clasificarlas, ya sea para conservación, donación, basura o reciclaje. De esta manera, se evita la pérdida de energía en el embalaje y transporte de objetos innecesarios.
Hoy en día, la comunicación se gestiona principalmente por medios digitales y muchas compañías, como bancos, tiendas y otras más, permiten que se realicen cambios o modificaciones a la información del usuario por medio de sus páginas web. Por ello, es importante actualizar el perfil personal con el cambio de domicilio y la nueva dirección.
Además, si la persona cuenta con un seguro de vivienda, lo primero que debe hacer es informar que no va a renovarlo y contratar otra póliza acorde a las características del nuevo hogar. Se debe actualizar la información de los seguros de vida, médico, de automóvil, entre otros.
Siempre es prudente tener actualizada la dirección en entidades estatales, como el SII y Carabineros, para que las notificaciones e información importante lleguen oportunamente. Además, eso evita obstáculos en trámites donde la dirección suministrada deba coincidir con la registrada en las bases de datos oficiales.
Si el traslado no se va a realizar por cuenta propia es bueno contratar una agencia de mudanzas que ofrezca seguros por daños y/o pérdidas de la carga durante el transporte.
Es importante dar un mantenimiento antes de la mudanza para llegar a vivir a un inmueble en óptimas condiciones.
La mayoría de los refrigeradores deben desconectarse, como mínimo 24 horas antes de moverlos, y luego de haberlos movido es necesario dejarlos reposar la misma cantidad de tiempo. De lo contrario pueden dañarse. Lo mismos sucede con el aire acondicionado, extractores y hornos.
Aplicando estos consejos, la mudanza no será un mayor problema. Todo sería cuestión de dedicarle algo de tiempo y, eso sí, evaluar de antemano varios proyectos inmobiliarios para encontrar la mejor alternativa.