La importancia de las supermanzanas y jardines verticales

La explosión demográfica que han vivido muchas ciudades, ha traído consigo mayor contaminación acústica, polución en el aire y falta de áreas verdes, haciendo las urbes menos habitables. Es ahí donde aparece el urbanismo ecosistémico, el cual busca introducir nuevos usos espaciales, que les permita a las personas ejercer sus derechos ciudadanos (de intercambio, cultura, ocio, expresión y desplazamiento) de manera cómoda, libre y saludable. 

Entre los instrumentos utilizados para este fin, están las supermanzanas y los jardines verticales, estructuras enfocadas a hacer el espacio público atractivo, ergonómico y sostenible.

¿Qué son las supermanzanas y los jardines verticales?

Las supermanzanas son una tendencia que ha tenido auge en Barcelona, España, al incorporarse en su más reciente Plan de Movilidad. Son espacios urbanos que abarcan áreas de no menos de 400 x 400 metros cuadrados, que tienen como fin darle prioridad al peatón, reducir la cantidad de autos e incrementar las áreas verdes. La circulación de vehículos y transporte se da principalmente por las calles periféricas, permitiendo únicamente el paso de bicicletas y camiones de carga. 

En cuanto a los jardines verticales, se han sumado a la arquitectura paisajista, encontrándolos principalmente en fachadas, tejados, bordes de puentes, entre otros, como una alternativa para combatir el cambio climático, purificar el aire e incluso promover la creación de huerto urbano, en lugares donde el espacio imposibilita grandes extensiones de áreas verdes. Se trata de tapizar las superficies mencionadas con plantas, sin necesidad de usar el suelo. 

¿Por qué son importantes en el desarrollo de las ciudades?

De acuerdo con el Banco de Desarrollo de América Latina, el 75% del espacio público está ocupado por calles que facilitan la movilidad de buses, motocicletas, vehículos particulares, entre otros, excepto el libre y seguro tránsito de las personas. De hecho, solo el 0,3% del espacio está dedicado a los transeúntes, mientras que el resto está destinado para transporte público y autos individuales. 

Si bien, mucha gente se desplaza por la ciudad a través del transporte urbano, el mal balance en la construcción de vialidades ha hecho que el espacio público pierda su función principal: un lugar donde los vecinos convivan y disfruten de un rato de esparcimiento.

Además, el excesivo aumento de vehículos motorizados y la falta de espacio para caminar, ha tenido un fuerte impacto en el medio ambiente y en la salud pública. Por un lado, se ha promovido el sedentarismo, dando paso a diversas enfermedades, a la vez que se ha contribuido al calentamiento global; se estima que las ciudades generan el 70% de las emisiones de CO2. 

En este panorama, su construcción se ha vuelto indispensable dentro de los temas de movilidad, espacio público y medio ambiente, pues ayudan a que haya una redistribución más eficiente e igualitaria del espacio, y a mejorar el bienestar físico de las personas. 

Beneficios de las supermanzanas y jardines verticales

• Aumentan la esperanza de vida en casi 200 días de media por persona.
• Reducen los niveles de contaminación del aire en la ciudad.
• Disminuyen el uso de transporte privado y, por tanto, el ruido a causa de la congestión vehicular.
• Entregan mayor confort térmico y espacios más anchos para actividades recreativas.
• Diversifican las modalidades de desplazamiento: a pie o bicicleta. 
• Su infraestructura permite la gestión eficiente de recursos: agua, materiales y energía.
• Se aprovechan los jardines verticales para regular la temperatura interior de los edificios, ya sea con plantas o con el cultivo de un huerto urbano en departamentos.
• Brindan descanso en medio de tanta saturación de estímulos y contaminación visual.
• Previenen muertes prematuras, al ayudar a eliminar compuestos orgánicos volátiles por medio de espacios verdes.

Sin duda, las nuevas tendencias en urbanismo están enfocadas a ofrecer una mejorar calidad de vida, lo cual incluso se lleva al interior de proyectos inmobiliarios incorporando mayores áreas verdes e impulsando la creación de huertos urbanos.