Invertir en inmuebles es inteligente, pues son activos fijos que se valorizan con el tiempo mientras generan renta a largo plazo; de ahí que el 40% de quienes compran departamentos nuevos lo hagan como inversión y los destinen a arriendo. Sin embargo, una mala elección puede derivar en pérdidas importantes de capital. Para tener éxito en la operación y disminuir el riesgo hay que aplicar los siguientes consejos:
Los departamentos suelen ser más rentables que las casas porque exigen menos mantenimiento y el costo es menor. Sin embargo, es importante revisar el índice de rentabilidad de la propiedad a comprar, dado que este puede variar en función de su tamaño o la zona.
En cualquier caso, para que haya rentabilidad es importante que el dividendo del crédito hipotecario sea menor al arriendo.
La ubicación es determinante a la hora de arrendar el inmueble, porque influye significativamente en la plusvalía. Los proyectos inmobiliarios con buen equipamiento, zonas verdes, comercio y servicios, y cercanía a metros son los que mayor rendimiento muestran al respecto. Un ejemplo de esto es el aumento de la plusvalía en comunas cercanas a la Línea 3 del metro, como es el caso de La Reina.
Es importante revisar los planes de desarrollo para saber qué proyectos de valorización tendrán influencia en la zona donde se encuentra el departamento. La construcción de vías, líneas de metro, estadios, escuelas, centros médicos incrementan significativamente el valor de las propiedades.
Para no tener dolores de cabeza a futuro, es importante contar con un colchón monetario para atender eventualidades como vacancia o reparaciones locativas inesperadas.
Una máxima del buen inversionista es “comprar barato para vender caro”. En ese sentido, hay que buscar la forma de adquirir la propiedad al menor precio posible.
Los departamentos en verde son una excelente opción para los proyectos inmobiliarios porque, además de permitir la financiación de la cuota inicial, le dejan ganar al inversionista la plusvalía generada entre la fecha de pacto de compraventa y la terminación del proyecto.
No está de más que el inversionista contrate los servicios de un personal shopper inmobiliario que le ayude a encontrar una propiedad acorde a sus necesidades.
Según la Reforma Tributaria, al comprar un inmueble se debe pagar el IVA, si el costo es mayor a 2.000 UF, a menos que la compra se haga a través de un subsidio habitacional.
Más allá del valor de la vivienda, hay que evaluar los gastos de escrituración, registro en el Conservatorio de Bienes Raíces, seguros, adecuaciones, etc. De esa manera el inversionista sabrá realmente cuánto costará en su totalidad la operación.
Si el departamento es usado, es importante verificar que no tenga adeudos por gastos comunes, servicios domiciliarios, etc.
La Carga Anual Equivalente es un indicador que permite comparar el valor total y real de las distintas alternativas de financiamiento ofrecidas por los proveedores de estos productos o servicios. Al revisarlo con detenimiento, el inversionista puede saber a ciencia cierta cuál es el crédito que más le conviene.
El gremio inmobiliario prevé un alza de 10% en ventas de viviendas para 2019. Es decir que la demanda por unidades habitacionales seguirá creciendo, y con ello el valor. Nuevamente, los departamentos en verde se configuran como una opción para invertir ahora, antes de que la oferta sea menor.