Cada vez son más apetecidos los departamentos nuevos en El Golf, barrio que nació como una ciudad jardín en la década de 1930 y hoy representa el corazón financiero, empresarial y del lujo de la capital chilena.
Se erigen modernos edificios que conviven con construcciones clásicas, enormes y vanguardistas torres corporativas y paisajismo de primer nivel. De ahí que algunos ciudadanos lo llamen “Sanhattan”.
Ha pasado casi un siglo desde que se realizaron los primeros loteos de los terrenos que dieron origen al barrio. A inicios de 1930, el país vivía un auge económico considerable y se inició el proyecto del barrio cívico en el centro de Santiago. Por lo cual las familias más adineradas que vivían allí abandonaron sus palacetes y se trasladaron a al área, entonces rural, que hoy comprende el barrio El Golf.
Las primeras edificaciones se construyeron en el eje central de El Golf, en la intersección de las calles Apoquindo y Gertrudis Echeñique, con un espíritu rupturista en el que los chalets, bungalows y enormes casas de estilo neoclásico francés predominaron.
El objetivo era consolidar el barrio como una ciudad jardín, entendida como una zona no muy grande, diseñada para una vida saludable y cuyo crecimiento sería controlado, con preponderancia de áreas verdes y arborizaciones. Pocos imaginaban que décadas después comprar departamentos nuevos en El Golf sería de tanto interés para inversionistas de todo tipo.
Una de las casas más importantes en los inicios fue la de doña Elena Errázuriz Echeñique, que hoy es sede de la Embajada Británica, seguida de la de Loreto Cousiño, que actualmente pertenece a la Embajada de España.
En los años posteriores se mantuvo el desarrollo de edificios y casas con un marcado estilo neocolonial británico y neoclásico moderno y sencillo, en el que jugaron un papel importante arquitectos como Escipión Munizaga Suárez y Carlos Cruz Eyzaguirre, que diseñaron viviendas emblemáticas como la hoy residencia de la Embajada de Alemania.
En el ámbito del urbanismo, hubo preocupación por el paisajismo y la democratización del espacio urbano, representada en el diseño y construcción de varios jardines y zonas verdes. De hecho, en 1945 se prohibió la instalación de industrias en Las Condes, y se vendían como valor agregado de la zona los atributos naturales, la tranquilidad y el aire puro.
Cabe destacar uno de los grandes hitos del barrio en aquella época, especialmente en lo que respecta a urbanismo y diseño paisajístico: la inauguración en 1937 de la cancha del Club de Golf Los Leones en los faldeos del Cerro San Luis, cuyo diseño correspondió a Agustín Edwards Budge, quien estudió el diseño y planos de la cancha de golf, en conjunto con Edgard von Schroeders.
Actualmente es un pulmón verde que valoriza significativamente los departamentos en barrio El Golf y las propiedades en general.
A finales de los años cuarenta y principios del 50, empieza a verse una tendencia hacia el modernismo con obras como el ya demolido Cine el Golf, diseñado por el arquitecto Tomás Reyes.
Ya partir de 1980 la fisionomía del barrio con la construcción de altos y vanguardistas edificios empresariales, que se mezclaron con elegantes conjuntos de casas y espaciosas torres de departamentos en barrio El Golf. Todo esto impulsado por la construcción en los 70 del Metro de Santiago sobre el eje Apoquindo y las estaciones Alcántara, El Golf y Escuela Militar.
A nivel arquitectónico en las edificaciones, se empieza a dar más importancia al aprovechamiento del espacio, la simetría, la luz, la sustentabilidad. Y aparece uno de los grandes hitos de la arquitectura chilena de finales del siglo XX: la nueva Municipalidad de Las Condes, diseñada por Cristián Undurraga.
En conclusión, la historia del barrio nos muestra como el desarrollo inmobiliario ha ido de la mano de las tendencias, poniendo gran foco en la arquitectura y urbanismo de la zona. Aún conserva aires clásicos y ha logrado conciliar las casonas, las torres corporativas emblemáticas y los mejores edificios de departamentos nuevos en Las Condes.
En ese contexto, para quienes desean comprar departamentos nuevos en El Golf se encuentran importantes proyectos, como Isidora & Benjamín, con un estilo arquitectónico vanguardista, minimalista, funcional, urbano y de alto nivel.